En realidad está muy buena. El encuadre, la luz, los personajes. Me impacta el contraste de esa paz de la mujer con la mirada puesta en algun pensamiento y el niño durmiendo en brazos con la vertiginosidad del afuera pasando velozmente. Bien congelado ese instante. La línea de la ventana no molesta de entrada, pero si, efectivamente distrae un poco.
Un abrazo